Alejandro Medina: Fue uno de los puntos más altos del equipo al salvar el empate en más de dos ocasiones, previas al primer gol del rival. Victima de errores ajenos, tuvo amor propio y fue a buscar el empate de cabeza, con la mala suerte que su remate fue directo al palo. Nuevamente el más rescatable del equipo.
Néstor Breitenbruch: Comenzó muy errático pero luego se asentó en lo que respecta a la posesión y el juego asociado. Defensivamente estuvo correcto, salvo en el segundo gol que dejo un hueco insólito para que Fernández reciba solo y decrete el 2 a 1 final.
Maximiliano Centurión: Estaba siendo una de las figuras del equipo, sacando todo de arriba y de abajo con mucha presencia física y posicionamiento. Pero promediando el segundo tiempo, un despeje suyo generó cambiar el partido. Su mal cabezazo golpeó en Pombo y dejo al delantero solo para que defina ante Medina. En el segundo tiempo también sufrió a su espalda.
Joaquín Pombo: Estuvo muy bien hasta el empate. En el segundo gol no achico y Uvita volvió a definir magistralmente. Ni antes ni después de esos minutos fatídicos no mostró errores.
Adrián Sporle: No sufrió en defensa y subió con criterio. Al principio estuvo algo impreciso pero con el correr de los minuto su juego mejoró. Tiró buenos centros al final del encuentro.
Lucas Brochero: Fue el más incisivo en los primeros 25 minutos de Arsenal, mostrando mucha movilidad y verticalidad. Luego se fue apagando y no desequilibro. Se espera que sea más punzante en los últimos metros.
Felipe Peña Biafore: Nuevamente fue el eje del equipo. Recuperó, quitó, marcó, jugó y se movió por todo el medio. Además en varias oportunidades fue el primer pase de Medina. Por momentos se lo vio muy solo para asociarse.
Gonzalo Muscia: Tuvo buenas apariciones en tres cuartos de cancha para darle fluidez al equipo pero no fueron suficientes para ser determinante en el partido.
Lautaro Guzmán: Si bien no siempre tomó buenas decisiones, fue rebelde cuando el partido se mostró cuesta abajo. Y cuando hubo que marcar, lo hizo sin problemas. Ofensivamente no gravitó.
Santiago Toloza: Durante el primer tiempo metió el centro en el gol de Bedoya y no mucho más. Ya en el segundo tiempo, con el resultado adverso, fue quién se puso el equipo al hombre y buscó el empate con ímpetu.
Flabian Londoño Bedoya: Se peleó con todos los defensores y tuvo su premio al anotar su segundo gol con la camiseta de Arsenal. No hizo más que fajarse con rivales en pelotas divididas.
Facundo Pons: Poca participación en el juego durante sus más de 25 minutos en cancha.
Daniel Lucero: En sus pocos minutos en cancha, casi empata el partido con una volea de media distancia que sacó muy bien Bologna.
Juan Peinipil: Casi no la tocó.
Federico Vilar: Planteó un buen partido, con los mejores jugadores que tiene en el plantel y sin inventar posiciones extrañas. Esto se vio reflejado en los primeros 45 minutos cuando anuló a uno de los mejores equipos del país y pudo irse arriba en el marcador. El complemento parecía ser más de lo mismo, pero la suerte (y las desinteligencias) le jugaron una mala pasada cuando en 5 minutos el Halcón dio vuelta el resultado. Pudo haberlo empatado pero nuevamente el destino no quiso que así sea. Final de partido anunciado para un futuro que parece sentenciado.