Se volvió a perder de visitante, esta vez fue 1-0 frente a un Vélez que hizo poco y se quedó con mucho. 15 partidos perdidos en el torneo hacen que todo parezca imposible.
Es muy difícil sentarse a pensar y a escribir cuando parece que ya no hay mas palabras para usar. Que todas las frases ya fueron mencionadas, que todas las imágenes fueron vistas y repetidas en reiteradas ocasiones. Es muy difícil aferrarse a la ilusión de seguir jugando en primera cuando fecha a fecha el resultado es siempre en contra. Es cierto que hay cosas que se hacen bien, hay otras que se hacen mal y hay otras que no son ni una ni otras, pero lo que pase siempre es contra de Arsenal.
Frente a Vélez se jugaron 45 minutos aceptables, presionando, buscando el error del rival y generando 2 situaciones muy claras de peligro y algunas otras que se generaron a través de la pelota parada. En esos primeros 20 minutos, primero el palo le ahogo el grito de gol a Londoño (juegó muy solo durante todo el partido) después de Giannetti saco de cabeza sobre la línea lo que era gol de Guzmán y Burian, dos veces, le detuvo sendos remates a Centurión; uno desviando un centro y la otra con un cabezazo que buscaba red.
Hasta ahí Arsenal siempre dio la imagen de ser un poquito más, de no estar tan nervioso como estaban los jugadores locales y como estaba la gente en los 4 sectores del estadio. El equipo de Méndez casi nunca se aproximó con peligro al arco de Medina.
El segundo tiempo fue otra historia, partido más parejo, más friccionado, donde se repartían la pelota en medio campo y con pocas o casi ninguna situación de peligro en ambos arcos. Por momentos Arsenal se metió demasiado atrás, regalándole la pelota y campo al rival. Lo malo también de esa segunda parte es que se demoró mucho en hacer los cambios y el realizado (antes del gol de Velez) daba la sensación que no era el correcto. Y por ese lado donde no estaba Brochero (reemplazado por Peinipil) y donde tampoco estaba Souto (estaba siendo atendido por segunda vez fuera del campo) vino el centro de Ortega, un centro que fue porque fue, tirar por tirarlo, para ver que encontraba en el área y encontró una volea hermosa de Castro desde el punto de penal y la bola impactó donde nunca jamás nadie lo imaginó (patea mil veces más y las mil van a la tribuna) y así lo gano Velez, y lamentablemente volvió a perder Arsenal.
Pocas palabras, pocas frases, poco para comentar de los partidos, pocos puntos, pocas fechas por jugar y todo parece ser poco, cuando todo cuesta el doble y cuando uno se ve mas hundido en el fondo de la tabla. Habrá que seguir intentando, hay que seguir luchando, no hay que bajar los brazos, a esta altura cuando todo parece estar perdido sepan jugadores, dirigentes, hinchas y periodistas que por más que la suerte parece estar echada todavia hay mucho por ganar, el tema es saber como hacerlo.